SEGUNDA SESIÓN (28 de octubre de 2022)
- Objetivos en esta sesión:
- Reflexionar sobre la importancia de la seguridad afectiva como pilar básico para un desarrollo favorable.
- Analizar las respuestas que damos a las necesidades afectivas de los niños y los buenos ratos que pasamos juntos.
- RESUMEN 1ª sesión: Es importante hacer explícitos, para los papás que se incorporan hoy, los tres ámbitos esenciales que se van abordando durante la escuela y que es esencial cultivar de forma equilibrada.
- Los hijos: cómo acompañarles de forma segura, empática, afectiva, disfrutando de nuestra relación con ellos; aspectos relativos a la crianza como la alimentación, el sueño, el control de esfínteres, etc.
- La pareja: comunicación, resolución de conflictos, temores, cómo cuidar nuestra relación ante los cambios que supone la llegada de los hijos.
- El propio bienestar personal: cuidar de nosotros mismos, concedernos tiempo, ajustar nuestro nivel de exigencia, disfrutar de esta nueva etapa sin abandonar quiénes somos, lo que nos gusta…
Para ello hay que buscar acuerdos, igual que acordamos un reparto de tareas, o el nombre del bebé, hay que acordar pautas de crianza, la nueva organización familiar, cómo gestionar las visitas...Y confiar en que somos capaces de hacer cambios.
- En nuestra segunda sesión, trabajaremos los siguientes aspectos:
- Visionamos hoy un fragmento de la película hispano-argentina KAMCHATKA, en concreto entre los minutos 44´46" al 46´55", como punto de partida para el desarrollo de la sesión.
- Después de visionar la película, REFLEXIONAMOS en pequeños grupos intentando contestar las siguientes preguntas:
- ¿Qué nos sugiere lo que hemos visto?
- Recordamos los buenos momentos que pasamos con nuestros hijos.
- ¿Cómo les damos seguridad?
RESUMEN final de la sesión: IDEAS CLAVES.
Ø El apego es una necesidad vital que genera en el niño un sentimiento de bienestar, la seguridad básica necesaria para adquirir la confianza en sí mismo y en los demás (desarrollo emocional) y fomenta el deseo de aprender y descubrir (aprendizaje).
Ø El vínculo afectivo que se va construyendo entre los padres y el niño será más sólido en la medida que los padres sean sensibles a las necesidades de los niños y las cubran. Desarrollar la capacidad de ponernos en su lugar ayuda a entender sus reacciones, el llanto...y a dar una respuesta ajustada.
Ø Además de compartir con los hijos los momentos de juego, la risa, las expresiones de cariño...es necesario decirles que les queremos, también cuando ha habido algún conflicto y les regañamos por algo. Es importante no poner etiquetas y diferenciar lo que los niños hacen (rabietas, portarse mal...) de lo que son: lo que nos produce rechazo son sus conductas nunca ellos.
Ø La función de los padres es:
- Responder a las necesidades de los hijos de manera serena y segura. Por ejemplo, cuando nos aconsejan no coger al bebé en brazos para que no se acostumbre, ésta no es una respuesta ajustada a sus necesidades. En ocasiones cogerle puede se necesario para satisfacer la necesidad de sentirse seguro, calmarle; en otras podemos sustituirlo por hacerle una propuesta que le distraiga o bien hablarle con suavidad y calidez. Nunca dejar llorar sin más, es una respuesta adecuada.
- Ir poniendo palabras a esas emociones, contenerlas cuando ellos no pueden, mostrar cariño y seguridad evitando siempre el chantaje emocional.
Ø No podemos hacerlo bien si nosotros no estamos bien. Tenemos que controlar nuestras propias emociones y reconocerlas (enfado, cansancio, tristeza...) porque están condicionando nuestras actuaciones con los hijos. Ser conscientes de cómo estamos nos permite buscar soluciones, sacar nuestros recursos y evitar que las posibles carencias en un momento determinado nos lleve a intentar cubrirlas sólo con el afecto de los hijos.
Es importante que confiemos en nuestros hijos pero, primero tenemos que confiar en nosotros mismos.
- Es importante afianzar nuestra propia seguridad: todos hacemos cosas bien y de los errores podemos aprender.
- Démonos espacios para tomar contacto con nosotros mismos y saber cómo estamos y qué necesitamos para estar mejor. Desarrollar el hábito de mantener la calma ante las dificultades y analizar qué está pasando, facilita dar una respuesta más ajustada.
- El modo de estar en la vida y nuestra actitud ante las dificultades depende de nosotros. Vendrán días o etapas difíciles en nuestra vida, si nos conocemos y aprendemos a activar nuestros puntos fuertes podremos abordar estos proceso haciendo lo más ajustado y que nos haga sentir mejor.
- Controlar nuestras emociones nos permite reconocer que nuestro enfado, cansancio, tristeza...influye en el modo de estar con nuestros hijos por lo que, podemos enfrentarnos a la actividad (hora del cuento por ejemplo) de otra manera.
- Las conductas de los niños que nos enervan o preocupan pueden ser indicadores de alguna necesidad o problema que no saben expresar. Si observamos, analizamos y contrastamos (en algunos temas con la escuela infantil), podremos llegar a comprenderles y buscar el modo más adecuado de responder.
- Nuestra respuesta a sus necesidades debe ser siempre serena y segura. Evitemos poner etiquetas y responder con frases generalizadas o simplistas.
- La meta más trascendente en la vida de pareja es integrar las dos personalidades que la constituyen en la construcción de un "Nosotros".
- Cuando dos o más personas deciden voluntariamente hacer algo juntos de forma continuada, casi siempre es porque tienen una meta en común. En el caso de la pareja, y más si decide tener hijos, pasa por comprometerse a caminar juntos, cuidarse, cuidar a los hijos, desarrollar las potencialidades de cada miembro de la familia, integrarse en un espacio social compartiendo los elementos básicos de la vida...
- A la vez que trabajamos todas estas metas, vamos aprendiendo a compatibilizar los diferentes estilos de vivir, educar, disfrutar, quererse, abordar los conflictos...Y va surgiendo el NOSOTROS.
- La vida en pareja y familia es una excelente oportunidad de desarrollo personal y grupal, tanto en el ámbito cognitivo como en el emocional.
TAREA:
Identificar qué aspectos de los que hemos hablado nos cuestan más y qué nos ayuda.